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¿Por qué es necesaria la regeneración de tejidos?
La enfermedad periodontal afecta progresivamente a los tejidos de soporte del diente, avanzando desde los más superficiales – encía – hasta los más profundos – hueso –. También es frecuente encontrar pérdidas sustanciales de hueso en personas de edad avanzada, pacientes que padecen osteoporosis y fumadores. Cuando la destrucción de hueso es importante puede causar la pérdida de las piezas emplazadas en esa sección ósea.
Gracias a las técnicas de regeneración más avanzadas podemos recuperar los tejidos perdidos devolviendo parte del soporte dentario. La regeneración de tejidos está indicada en pacientes que han perdido piezas y su soporte oseo, y que de otro modo no podrían colocarse implantes dentales.
Preguntas frecuentes
¿Qué materiales se utilizan en la regeneración de tejidos?
¿Qué materiales se utilizan en la regeneración de tejidos?
Entre los materiales de regeneración distinguimos injertos óseos, geles de proteínas y membranas para el aislamiento y consolidación ósea.
- Injertos óseos: Existen distintos tipos de injerto en función de su origen.
- Autoinjertos: Consiste en la extracción de tejido óseo de una zona donante – intraoral o extraoral –, que se coloca en la zona a regenerar. Los injertos de hueso autólogo – hueso del propio paciente – pueden realizarse particulados o “en bloque”. Ambos generan excelentes resultados, pero tienen la desventaja de aumentar ligeramente las molestias posoperatorias al tener que intervenir en dos zonas.
- Aloinjertos: Alternativamente existen bancos de hueso humano procesado. Esto evita la necesidad de intervenir la zona donante.
- Xenoinjertos: De modo similar, podemos utilizar hueso de origen animal – generalmente bobino –.
- Aloplásticos: Existen además distintas alternativas con materiales sintéticos como hidroxiapatita o cristales bioactivos.
- Geles de proteínas: Este tratamiento se basa en la obtención de un concentrado de factores de crecimiento a partir de una pequeña extracción de sangre del propio paciente, que se centrifuga y procesa. Los factores de crecimiento son proteínas que se encuentran en las plaquetas y el plasma sanguíneo, y son responsables de regenerar los tejidos.
La regeneración tisular a partir de plasma rico en factores de crecimiento favorece la evolución de determinados injertos y puede reducir el tiempo de integración del implante en el hueso. Esta técnica se utiliza tanto en odontología como en otras especialidades médicas –cicatrización de úlceras, regeneración de tejidos oculares o consolidación de injertos –. En cirugía oral existen dos formas fundamentales de aplicación: geles o membranas de fibrina.
- Membranas: Las membranas actúan como barrera que estabilizar y protege el espacio en el que se regenera el tejido óseo. Deben ser biocompatibles, inertes y fáciles de manejar.
Las membranas pueden clasificarse en reabsorbibles y no reabsorbibles
- Las membranas no reabsorbibles pueden ofrecer mejores resultados en casos particulares aunque presentan el inconveniente de tener que retirarse en una segunda intervención entre 4 y 6 semanas después de su colocación.
- Las membranas reabsorbibles son las más utilizadas y pueden ser de origen natural – de colágeno o de origen animal – o sintéticas. El tiempo de reabsorción suele oscilar entre 6 y 12 semanas.
¿En qué consiste el tratamiento?
¿En qué consiste la regeneración de tejidos ?
Como hemos visto, la regeneración ósea permite la colocación de implantes en pacientes en los que, de otro modo, no sería posible este tratamiento. Los procedimientos de regeneración pueden realizarse previa o simultáneamente a la colocación de los implantes, en función de la cantidad de hueso inicial del paciente.
Existen distintas técnicas entre las que destacamos la regeneración ósea guiada, la preservación alveolar y la elevación de seno maxilar:
- Regeneración Tisular Guiada RTG: Esta técnica utilizada para la regeneración del tejido periodontal se basa en la utilización de membranas biocompatibles que aíslan y protegen el defecto óseo, separando el hueso implantado de los tejidos blandos.
- Regeneración Naturalmente Guiada RNG: En este caso se utilizan membranas de fibrina, proveniente de una extracción de sangre convencional del propio paciente que es centrifugada y procesada. La fibrina se extrae del plasma sanguíneo previamente a la intervención.
- Preservación alveolar: Esta técnica se utiliza tras la extracción de una pieza, para reducir la reabsorción natural del hueso que se produce al perder un diente. Esto facilita la posterior colocación del implante.
- Elevación del seno maxilar. Esta técnica se utiliza en la zona posterior de la arcada superior cuando la altura ósea hasta el seno maxilar es insuficiente para recibir un implante dental. Se colocará el injerto óseo entre el suelo óseo del seno maxilar y la membrana que lo reviste.
¿Cuánto tiempo debe transcurrir desde el injerto de hueso hasta la colocación de los implantes?
¿Cuánto tiempo transcurre desde el injerto de hueso hasta la colocación de los implantes?
El tiempo entre el injerto y la colocación de los implantes varía en función de la cantidad y tipología de hueso que se haya colocado. En determinadas ocasiones y cuando el incremento requerido es muy pequeño, puede realizarse un injerto óseo en la misma cirugía en que se colocan los implantes. En otros casos, pueden transcurrir hasta 6 meses para que el nuevo hueso se integre.
Habitualmente, el proceso de osificación requiere de unos 3 meses, tras los que obtendremos hueso nativo maduro. El comportamiento a largo plazo de los implantes ubicados en la zona regenerada es igual que si estuvieran colocados en hueso nativo del paciente.
¿Cuáles son las precauciones necesarias tras la intervención?
¿Cuáles son las precauciones necesarias tras la intervención?
Es importante que el paciente siga unas pautas adecuadas de cuidado e higiene:
- Tras la intervención, se recetarán antibióticos y antiinflamatorios. En caso de que haya dolor podrán tomarse analgésicos. No obstante, la inflamación y molestias desaparecerán aproximadamente en una semana.
- La higiene oral del paciente es fundamental para evitar la infección del injerto. Asimismo, para garantizar la correcta cicatrización, se podrá indicar la aplicación de un gel antiséptico en la zona.
- Adicionalmente, se deberá evitar la ingesta de alimentos duros o demasiado calientes en los primeros días tras la intervención. Por último, el consumo de tabaco es un factor que disminuye la vascularización afectando negativamente a la regeneración de los tejidos de soporte dentario.
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